viernes, 27 de mayo de 2016

CONVERSANDO, CONVERSANDO...





El conversatorio "Cantos y Cantas - La poesía oral en Colombia", realizado el miércoles 25 de mayo en el Auditorio del Banco de la República, fue un diálogo entre un investigador de la literatura oral del Caribe y del Pacífico colombiano (Adrián Freja) y el mayor conocedor de la poesía oral campesina de nuestra Boyacá y sus alrededores (Jorge Velosa). Se trató de una conversación entorno a las coplas, las décimas y los romances de distintas partes del territorio colombiano con el propósito de mostrar la importancia literaria de estas manifestaciones, sus principales características y la diversidad de la poesía oral en Colombia repartida por todo el territorio nacional.

"La música de mi tierra / es música no igualada, 
los toches llevan la voz  / y hace bajos la quebrada"
(Refranero Popular)

"La vida pa'ser bonita / dos cosas debe tener,
risa to'a la que le quepa / y canto a más no poder"
(Jorge Velosa)

"Pa'tener vida contenta / solamente necesito:
mi requinto, una morena / y un sorbo de guarapito"
(Rafael H. Lizarazo)


MIS COPLAS
(Coplas)

Por los campos de mi tierra
cantan sus coplas las viejas,
los viejos se "jingen" sordos
pero paran las orejas.

Santa Bárbara bendita
abogada de los truenos,
que yo no ponga mis ojos
en "arremuescos" ajenos.

El hombre que vive solo
se va llenando de mañas,
se le arruga el "condenillo"
y le salen telarañas.

Se brega mucho en la vida
teniendo mujer y moza,
en problemitas de "jaldas"
el que no sufre no goza.

Las mujeres cuando quieren
dan "señitas" del querer,
porque cuando el hombre pasa
siempre se asoman pa'ver.

Le agradezco lo que tengo
a los "güeyes" y al ara'o,
aunque no consiga novias
por andar tan joroba'o.

La mujer cuando es celosa
no tiene "tranqulidá",
pensando que su marido
levanta el rabo y se va.

Esto dijo el armadillo
con su traje de postín,
no hay "jlorecitas" tan bellas
como las de mi "fardín"

Allá arriba en aquel alto
suspiraba un gavilán,
y entre suspiros decía
mis pollitas "on'tarán".

Por aquella loma'bajo
vienen dos almas en pena,
la mujer aunque regañe
nunca deja de ser "güena".

Otra vez la burr'al trigo
y el caballo a la cebada,
"la'güepanela" sin dulce
y la sopita salada.

Todavía me "arrecuerdo"
y no se me han olvida'o,
las cantas de los "gañanes"
cuando cogían el ara'o.

Ya con esta me despido
no sé cuando "golveré",
pero si algún día regreso
otras coplas cantaré.


Rahulig/016
DRDA


Imagen: El Conversatorio
Uptc - Radio


domingo, 22 de mayo de 2016

UNA TERTULIA EN LA PLAZA





Congregados en el centro de la plaza, un pequeño grupo de adultos mayores, departían melancólicamente y se lamentaban de cómo después de tantos años trabajando no habían logrado obtener una pensión de jubilación. Sintiéndome aludido, pues estoy en las mismas condiciones, me atreví a intervenir: —¡Perdonen, mis señores, la imprudencia... quisiera unirme a la tertulia! Les dije, mientras me acomodaba. Según avanzaba la tarde, yo iba pensando en alguna composición que, en parte, resumiera lo conversado.


SOBREVIVIENDO
(Carranguera)

Yo imaginaba que al final de mis días
sería dichosa y tranquila mi vejez,
pero comprendo que ya no hay garantías
y que la dicha se queda en un tal vez.

Toda la vida yo anduve fue soñando
con una casa cerquita de un palmar,
mas los asuntos se fueron complicando
y al fin de cuentas no pude coronar.

Para qué diablos soñar con utopías
que francamente no se podrán cumplir,
si a mi me toca fingir las alegrías
metiendo el hombro para sobrevivir.

Yo imaginaba mirándome al espejo
que sufrimientos no habría de tener,
pero resulta que ahora siendo viejo
la veo negra para poder comer.

Todos los días revuele que revuele
pa'no dejarme morir de inanición,
mas no me importa seguir dele que dele
mientras palpite mi ardiente corazón.

Para qué diablos me quejo de la vida
si lo sufrido también me lo gocé, 
para que diablos buscar otra salida
si mi destino yo mismo lo forjé.

¡Para qué diablos buscar otra salida
o echar de menos el tiempo que se fue!


Rahulig/016
DRDA


Imagen: La Plaza de Bolivar
Tunja, Boyacá


martes, 17 de mayo de 2016

ANTONIO AGUILAR (1919-2007)





José Pascual Antonio Aguilar Márquez Barraza, mejor conocido como Antonio Aguilar, fue un cantante, actor, compositor, productor, intérprete, guionista y cineasta mexicano. Si aún viviera, hoy estaría cumpliendo noventa y siete años de edad, pero se murió el diecinueve de junio del año dos mil siete y, ahora recuerdo que por aquellos días, le compuse una canción ranchera para despedirlo en su viaje postrero. Don Antonio Aguilar y sus canciones fueron grata compañía durante mis años mozos y, aún, lo siguen siendo... al calor de unas varias copitas de aguardiente.


DON ANTONIO
(Sextillas - Ranchera)

Se murió el Charro más viejo, 
el mejor que nos quedaba,
ese que siempre cantaba
con alma, vida y sombrero,
y en defensa de los pobres
ponía su pecho primero.

En Zacatecas nació,
allá mismo lo enterraron,
sus amigos lo llevaron
cumpliendo con lo pactado:
hasta el centro de una milpa
donde lo trilla el ganado.

Se fue tal como vivió, 
rodeado de sus amores,
sus hijos también cantores
y su linda Florecita,
la que inspiro sus canciones 
por ser "Alta y delgadita".

Aunque al cielo se haya ido
seguirá siempre rodando,
cuando escuchemos sonando
en la radio una ranchera:
"Lucio Vásquez, Cuatro milpas,
Patas blancas, ¡Ay! Chabela".

Arriba podrá encontrarse
con los que antes se marcharon,
que también nos deleitaron
con su voz tan resonante:
Pedro Vargas, José Alfredo,
Mejía, Solís e Infante.

Adiós, adiós, Don Antonio 
de Aguilar por apellido,
tan recordado y querido
por su pueblo, por su gente,
nos despedimos cantando: 
¡El hijo desobediente...!


Rahulig/2007
DRDA


Imagen: Antonio Aguilar
De la Internet



sábado, 14 de mayo de 2016

PEQUEÑAS MARAVILLAS





Ante nuestros ojos aparecen, de repente, pequeñas maravillas que son como bellos regalos de la madre naturaleza. Esta mañana, mientras caminaba por la plaza principal, me topé con dos palomitas que muy orondas picoteaban al lado de una florida buganvilia y, sin dudarlo un momento, las capturé con la cámara de mi teléfono celular. Al regresar a casa y ver la foto en el ordenador, se me ocurrieron unos versitos alusivos al instante tan bonito.


PALOMITAS
(Tercetillos)

Qué lindas las palomitas
la maceta picoteando,
en busca de migajitas.

 Son las reinas de la plaza
revoloteando felices,
como si fuera en su casa.

Se las puede ver muy bellas
del campanario posando,
cerquita de las estrellas.

Tempranito en las mañanas
despliegan sus alas grises,
al repicar las campanas.

Y, raudas pasan volando,
con diferentes matices:
el firmamento adornando.


Rahulig/016
DRDA


Imagen: Dos palomitas
 De mi móvil


domingo, 8 de mayo de 2016

CLAVELITOS CON AMOR





En los tiempos de mi lejana infancia se acostumbraba que en el segundo domingo de mayo, Día de las Madres, los niños de las escuelas municipales asistiéramos a misa todos vestidos de blanco en homenaje a nuestras progenitoras. Además, cada uno, llevaríamos prendido al pecho un clavelito rojo, si nuestra madre estaba viva; o blanco, si ella ya era muerta. Me parece estar allá, en la iglesia, parado junto a la señora Elvirita luciendo orgulloso mi clavel rojo en la solapa y, mientras, los niños huérfanos orando piadosamente por el alma de sus madres. Hoy... mi lindo clavelito carmesí, se ha tornado blanco.


MADRE
(Soneto con estrambote)

 Doquiera estés ahora, madre mía,
deseo que tu estancia sea hermosa
y conserves la luz, maravillosa,
que en tus ojos brillaba cada día.

Tú fuiste la ilusión del alma mía,
de mi jardín la más preciada rosa;
la mano que ofrecía bondadosa:
amor, ternura, dicha y alegría.

Tú fuiste para mí, la más bonita,
el más dulce entre todos los dulzores;
de todas las mujeres la más guapa.

Por eso, año tras año, madrecita,
  en tu honor luciré de mil amores...
un clavelito blanco en la solapa.

Una lágrima escapa
de mis ojos cansados de extrañarte,
cada vez que me da por recordarte.


Rahulig/016
DRDA


Imagen: Clavelitos blancos
De la Internet



jueves, 5 de mayo de 2016

MARTINA LA TORTUGUITA





La primera imagen que vimos en la pantalla el día en que le practicaron la ecografía a Paola Rosa, para saber como avanzaba lo del embarazo, fue la de una pequeña y tierna tortuguita moviéndose lentamente de lado a lada. El efecto óptico nos emocionó de tal manera que comenzamos a decirle tortuguita, mientras los padres le buscaban el nombre definitivo. Con el correr de los días nos fuimos acostumbrando al sobrenombre, tanto que ahora le decimos: "Martina la tortuguita". El pasado domingo, primero de mayo, estuvo de fiesta rodeada por toda la familia.


LA FIESTA
(Sonetillos)

I
Martina la tortuguita
de “baby shower” estuvo,
muchos invitados hubo
en esa fiesta bonita.

La madre su barriguita
lucía con mucho orgullo,
semejando ser capullo
de primaveral "Rosita".

En tanto los abuelitos
muy remilgados brindaban
con postres de gelatina,

con galletas, heladitos
y tortas que degustaban
cual sabrosa golosina.

II
Los ilustres visitantes
conformaron un conjunto
con patos y una gallina,

con jirafas y elefantes
para ponerle buen punto:
a la fiesta de Martina.

Ella nos mandó a decir
que muy pronto llegaría,
pues con inmensa alegría
al mundo quiere venir.

¿Qué más se puede pedir
si tendremos, cada día,
otra tierna compañía
para endulzar el vivir?


Rahulig/016
DRDA




Imágenes: La fiesta de Martina
Del álbum familiar



Información del Autor

Mi foto
Simplemente, un bohemio soñador. Hacedor de versos, creador de canciones e inventor de historias. Paz de Río (Boyacá) Colombia, 23 de abril de 1952.

Los que vuelan conmigo

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